La razón de esta propuesta fue delimitada por el director de CETEM en la XXXVII Jornada de la Asociación Argentina de Terapia Cognitiva. Afirmó allí que da respuesta a una necesidad del consultante en cuanto a:
–Duración del tratamiento. La sociedad en la que vivimos necesita respuestas a corto plazo de modo que las intervenciones eficaces breves y focales a corto plazo son bienvenidas.
— Sentir que la terapia se centraba en el problema una vez delimitado. La persona que consulta viene en la actualidad conociendo su problema, ha ensayado solucionarlo y no ha encontrado salida con sus propuestas-
– Se centra CÓMO -sin descuidar el por qué. En su paradigma explicativo sostiene que el reconocimiento de su problema necesita algo más que la explicación de su origen. La TC le permite identificar y modificación los Factores Actuales – es decir aquellos que mantienen e incorpora estrategias para modificarlos
– Al nacer integrativa (cita de A. Beck) la Terapia Cognitiva no descuida la variable Psicobiológica con intervenciones Psicofarmacológicas en los casos necesarios.
– Coincidimos – citando a Victorio Guidano- que: la terapia es un encuentro entre dos expertos: el paciente- experto en el problema, y el terapeuta experto en ciertos procedimiento para darle solución.
– De acuerdo con esto se identifica la variante estratégica más apropiada y el terapeuta más indicado para cada paciente en particular. La aceptación de la necesidad de diagnóstico- denostado por algunos- permite determinar la Intervención y el terapeuta adecuados.
– Nos adaptamos a las nuevas problemáticas actuales, (sexualidad, aborto, política, grieta, religión, pandemia) adaptando nuestras herramientas y estrategias, e incrementar la información sobre ciertos temas y problemáticas.